El pasado 12 de enero fue publicado en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía la Ley 2/2015, de 29 de diciembre, de medidas urgentes para favorecer la inserción laboral, la estabilidad en el empleo, el retorno del talento y el fomento del trabajo autónomo. En principio, se trataría de la última ocurrencia del PSOE andaluz para tratar de mejorar algo las espantosas cifras de paro que sufrimos desde el regreso de la democracia en 1978, pero ni eso.