El PP muestra su disposición de ‘ir a la guerra’ contra Sánchez por “manipular” RTVE
Las 23 preguntas presentadas recientemente por el Grupo Popular en el Congreso, en las que denuncia la ocultación del caso Begoña Gómez y de los abucheos a Pedro Sánchez durante la visita a España de Angela Merkel, dejan claro que RTVE será una baza importante para la oposición de los populares
16.8.18 VOZPOPULI. El futuro de RTVE se ha convertido en una de los asuntos prioritarios dentro de la agenda política española. La televisión pública ha perdido progresivamente una buena parte de su audiencia y de su influencia, pero todavía es un oscuro objeto de deseo para las principales fuerzas parlamentarias, que sobre el papel han expresado su deseo de despolitizarla, pero que, en la práctica, no renuncian a batallar por su control.
En esa lista de cuestiones -firmadas por el diputado Ramón Moreno Bustos- se hace referencia al Consejo de Informativos de TVE, al que el propio diputado había acusado con anterioridad de desprestigiar la labor de los periodistas de Torrespaña con las diversas denuncias por manipulación informativa que realizó durante la presidencia de Mariano Rajoy.Rosa María Mateo se convirtió hace menos de dos semanas en la administradora única provisional de la corporación e inició una serie de cambios en el organigrama de los Servicios Informativos que fueron criticados por el PP, al considerar que suponían la toma del control de la televisión pública por parte de Pedro Sánchez. Pocos días después, los populares presentaban 23 preguntas en el Congreso de los Diputados en las que denunciaban la ocultación deliberada en los telediarios de algunos asuntos incómodos para Moncloa, negada por los responsables de la corporación.
En una nota de prensa remitida por el partido, Moreno Bustos criticaba su silencio en lo que respecta al tratamiento que realizaron los informativos de los abucheos que recibió Pedro Sánchez durante la visita a España de Angela Merkel, así como en el caso de la contratación de la mujer del presidente, Begoña Gómez, por parte del Instituto de Empresa. “Todos aquellos justicieros que se desgañitaban acusando a la anterior dirección de RTVE y al PP de están de vacaciones o han enmudecido rápidamente, lo que demuestra la falta de credibilidad de todos ellos”, afirmaba.
Pagar con la misma moneda
La estrategia parece clara: ante las múltiples acusaciones por manipulación que recibió José Antonio Álvarez Gundín durante su mandato por parte de PSOE, Podemos y Ciudadanos, ahora cabe pagar a Rosa María Mateo y a Begoña Alegría –nueva jefa de Informativos- con la misma moneda. También al Consejo de Informativos, al que consideran alineado con la izquierda. De ahí que Moreno Bustos remitiera más de una veintena de preguntas a la administradora provisional de RTVE tan sólo una semana después de haber llegado a su cargo. Y de ahí que haya utilizado expresiones como “manipulación alarmante”, “ocultación de noticias”, “persecución de profesionales” o “asalto a RTVE” para expresar su opinión sobre la televisión pública.
Dentro de Torrespaña, la mayoría de los periodistas ha defendido los cambios realizados por la gestora provisional de RTVE, como se demuestra en que el nombramiento de Begoña Alegría lograra el apoyo del 85% de la redacción –su antecesor obtuvo el 3,75%- y el del director de informativos de Radio Nacional de España, Raúl Heitzmann, del 75,8%. Los Consejos de Informativos han apoyado la modificación del organigrama de RTVE, al igual que UGT y CCOO. El sindicato USO ha lamentado que la televisión pública siga moviéndose “al compás de los cambios políticos”, mientras que el Sindicato Independiente –alineado con la anterior dirección- ha lamentado la actitud de una parte de los trabajadores de Torrespaña, que buscan el “quítate tú para ponerme yo”.
En definitiva, los populares tratarán de utilizar la manipulación de RTVE contra el Gobierno de Sánchez sin el apoyo de una gran parte de Torrespaña y de quienes denunciaban el sesgo de los informativos en la anterior etapa. Una buena parte de ellos, alineados con los partidos progresistas.