Los recién publicados datos de siniestralidad de los nueve primeros meses del año, certifican el constante aumento de los accidentes laborales que, a pesar de la constante denuncia de USO, sigue sin ser noticia, sin producirse un debate social al respecto y, por desgracia, parece que se ha asumido como algo inevitable, que puedas dañarte o morir en el trabajo.
El abandono de las políticas de Prevención de Riesgos Laborales en nuestro país, el recorte en la inversión en PRL, la mercantilización de los Servicios de Prevención Ajeno, un modelo productivo con gran inestabilidad laboral y la precarización de las condiciones de trabajo, son alguno de los factores que provocan este aumento de la siniestralidad laboral, sin
que se adopten medidas al respecto.
que se adopten medidas al respecto.
Comparando los resultados publicados por el Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social con los del mismo período de 2017 cabe destacar:
- El aumento de los accidentes con baja, que se cifran en 451.677 accidentes, lo que se traduce en un incremento del 3,7% con respecto a 2017. De ellos, 391.293 ocurrieron durante la jornada laboral y 60.384 fueron accidentes in itinere.
- El número de accidentes durante la jornada laboral sube un 3,1% para los leves, un 5,2% para los graves y un 1% para los mortales.
- El número de accidentes in itinere experimenta un aumento del 6,1% para los leves y del 4,7% para los mortales, mientras que los graves descienden un 4,9%.
- En el balance general por sectores, el índice de incidencia de accidentes en jornada de trabajo desciende un 0,5%.
- El número de accidentes de trabajo sin baja notificados se traduce en un pequeño descenso del 1,0%.
- Desde el comienzo de 2018, al cierre de septiembre, 250 personas han perdido la vida por accidentes de trabajo mortales: 205 en la jornada laboral y, 45, al ir o volver del trabajo. Esto significa que hay una subida de las muertes por accidente de origen laboral del 1,6%. Los accidentes mortales en jornada suben un 1%, mientras que los que se producen in itinere, han aumentado un 4,7%.
Viendo los parámetros estadísticos globalmente, y, a falta de apenas los datos del último trimestre del año, 2018 acumula ya nueve meses negros en siniestralidad. Cada vez son más las personas que se accidentan en el trabajo, como también cada vez es mayor el enorme detrimento que esto supone para la sociedad en su conjunto.